sábado, 4 de agosto de 2012

Yo quiero mi gorro



Mi última adquisición no podría divertirme más: YO QUIERO MI GORRO, de Jon Klassen, ilustrador y diseñador gráfico Canadiense. Es su primer libro álbum, publicado en 2011 en Estados Unidos, “I want my hat back” y que este año 2012 ha llegado a España de la mano de la editorial Milrazones.

YO QUIERO MI GORRO es una historia de estructura repetitiva en la que un oso que ha perdido su gorro va preguntando a diferentes animales del bosque si lo han visto, incluido al conejo, que lleva puesto un sospechoso gorro rojo y puntiagudo. Los diálogos que se mantienen son muy similares, con apenas variación de un animal a otro.

Llama la atención el minimalismo de las ilustraciones. Son sencillas, de trazo claro y sobre fondo casi blanco. Tengo cierta tendencia a sentirme fascinada por los libros álbum tan limpios, sin distracciones, pero con esos pequeños detalles que requieren varias lecturas para ser valorados.

El libro maneja un sentido del humor sobresaliente. El oso, con una pinta de pánfilo que dan ganas de quererle y que demuestra no tener muchas luces, va preguntando a todos: ¿Has visto mi gorro? En general le responden: No, no he visto tu gorro. Él siempre añade: Bien, gracias de todos modos. La serpiente es de las más divertidas porque le responde, con una voz que imagino tirando a mística, suave, lenta y reflexiva: Una vez vi un gorro... era azul y redondo... El Oso la corta: El mío no es así. También es muy simpático el armadillo o esa especie de topo que le contesta: ¿Qué es un gorro?


En fin, se trata de un bosque repleto de cerebros ligeramente lentos. Las ilustraciones, estáticas, nos los muestran siempre enfrentados, pero, mientras el oso mira a los animales, éstos siempre dirigen su mirada al lector.

El final es lo mejor, cuando el Oso, deprimido y preocupado por no encontrar su gorro, es cuestionado por el ciervo: ¿Y cómo es tu gorro? Él reflexiona: Pues... es rojo y puntiagudo... y la siguiente página se enciende de rojo y el oso abre mucho los ojos. ÉL HA VISTO SU GORRO. Así que retrocede por todo el bosque hasta dar con el conejo. La imagen no tiene desperdicio. La tensión se palpa, uno se imagina la banda sonora de una película de acción y esta escena puede durar lo que se desee (es una de las ventajas de los libros álbum. El ritmo depende de lo que tardemos en pasar la página).


La cuestión es: ¿qué pasará con el conejo? Eso no lo cuento...

En general me parece un libro adecuado para todas las edades, especialmente niños un poco mayorcitos que puedan captar los dobles sentidos y el poder de lo que no se dice. Es el típico libro que enamora a los mayores y que, a primera instancia, probablemente no guste mucho a los más pequeños. Se maneja la elipsis y la tensión de forma magistral, y es un libro perfecto para ser contado, para jugar con las voces de los animales y con el ritmo del relato.

¡Recomendado queda!

2 comentarios:

  1. Sin duda, de los mejores álbumes que he leíd...que me han leído!
    Estupendo, sobresaliente.

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  2. jajajaja y en primicia, Guillermo, que pudiste observar el momento de su adquisición definitiva!!! ;)

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